Fidel Heras: el campesino mexicano que dejó su milpa para defender los ríos y fue asesinado

Mongabay Latam

Es el primer asesinato del año de un defensor del medio ambiente y el territorio en México. 

Ocurrió en Oaxaca, un estado del sur del país, donde han matado a 25 defensores en los últimos cuatro años. 

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Fidel Heras Cruz pudo haberse quedado en casa, cultivando su milpa (una chacra con plantaciones de maíz y frijol) y llevando una vida tranquila, sin riesgos. Pero cuando su comunidad necesitó de su ayuda para defender el territorio y el medio ambiente, se colocó en la primera línea hasta que, 14 años después, lo mataron.

Fue asesinado a balazos el sábado 23 de enero, abordo de su camioneta, a la altura de la entrada de la comunidad La Esperanza del municipio de Santiago Jamiltepec, en el estado mexicano de Oaxaca.

Heras Cruz estaba comprometido activamente con la defensa de un río que pasa por su comunidad y del que una empresa extrae arena y grava sin permisos oficiales, según explican personas allegadas a la víctima que por seguridad piden la protección de sus nombres. Aseguran además que Fidel Heras había recibido amenazas dos días antes de su muerte pero que prefirió no hacerlo público.

Pobladores del Ejido Paso de la Reina se han convertido en activistas desde que tuvieron ques enfrentarse a proyectos que amenazan al Río Verde. Foto: Cortesía COPUDEVER.

Esta última advertencia llegó “en físico”, es decir, en un papel que le dejaron en la sede del Comisariado ejidal de Paso de la Reina —su comunidad—, lugar al que acudía constantemente porque tenía el cargo más alto dentro de la organización. El ejido es una figura legal en México utilizada para repartir tierras en comunidades rurales.

“Había recibido anónimos físicos que le fueron a dejar a la construcción de la sede del comisariado (el Ejido Paso de la Reina está construyendo su nuevo local). No comentó nada y no se amedrentó. Siguió en la misma tesitura”, narra Marcos Leyva, quien conocía a Heras desde hace 15 años.

En México, un total de 19 personas defensoras del medio ambiente y el territorio fueron asesinadas entre 2019 y 2020, según un informe de Global Witness presentado en julio pasado. Después del informe, la lista siguió creciendo: otros cuatro defensores fueron asesinados.

El crimen de Fidel Heras Cruz es el primer homicidio de un defensor del medio ambiente en México durante el 2021.

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¿Quién era Fidel Heras?

“Fidel fue un compa muy comprometido. Se entregó a la defensa del Río Verde contra proyectos del gobierno. Como representante ejidal defendió la voluntad de su pueblo de no permitir la extracción de mineral pétreo. Tenía siempre una actitud muy sencilla. Tenía una sonrisa siempre”, cuenta Marcos Leyva. Lo mismo recuerda Heladio Reyes, promotor comunitario de la región de la Costa Chica, para quien Heras Cruz era, además, un campesino trabajador y un incansable activista.

En casa, ahora sin él, quedan su esposa, hijos pequeños y su padre enfermo que recibía los cuidados de Heras, el único de los hermanos que quedó en Paso de la Reina. Los demás emigraron a Estados Unidos.

Vista Panorámica del Río Verde, una rica veta de minerales que es el origen del conflicto que pudo haber causado la muerte de Fidel Heras Cruz. Foto: Cortesía COPUDEVER.

Fidel Heras pudo irse también,  pero se quedó en la milpa. Pudo dedicarse solo al cultivo de maíz, pero eligió hacer lo que le pidió su comunidad. Pudo alejarse del activismo, pero prefirió entregar los últimos años de su vida a la lucha por los ríos.

Fue también miembro del Consejo de Pueblos Unidos por la Defensa del Río Verde (COPUDEVER), una organización que trabaja en un extenso territorio costeño de Oaxaca, entre municipios, ejidos y comunidades con presencia de pueblos indígenas afromexicanos e indígenas chatinos y mixtecos.

En el estado de Oaxaca, lugar donde nació y murió, 25 personas defensoras del medio ambiente han sido asesinadas durante los últimos cuatro años, según informó la organización Coordinación para la Libertad de Personas Defensoras Criminalizadas en Oaxaca en un comunicado en el que condenó el homicidio de Fidel.

La última de las víctimas fue Eugui Roy Martínez, un estudiante de biología que vivía y hacía la mayor parte de su trabajo de campo en la región Loxicha, una zona serrana con un largo historial de violencia que —yendo desde el centro del país— da paso a la región de la Costa Chica, donde este sábado fue asesinado a balazos Heras.

Eugui Roy Martínez y Fidel Heras Cruz vivían en entornos hostiles y exponían cada día sus vidas para cuidar el medio ambiente.

La comunidad de Paso de la Reina a las orillas del Río Verde durante una jornada de Diálogos Interculturales por la Defensa del Territorio. Foto: Cortesía COPUDEVER.

“Ahí se suelen resolver los conflictos por la vía violenta”, lamenta Marcos Leyva, quien es integrante de Educa, una organización oaxaqueña dedicada a la defensa del territorio que acompañó a Fidel Heras desde sus primeros pasos en la lucha por el medio ambiente cuando, “por la voluntad de su pueblo”, se enroló en la defensa activa de los ríos.

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La defensa del territorio

Paso de la Reina es una comunidad de unas 2000 personas que siembra y cosecha sus alimentos para sobrevivir. Se practica la ganadería para abastecer a las familias y uno de los pocos cultivos comerciales es el del limón.

A lo largo del Río Verde, en la región de la Costa Chica de Oaxaca, hay pueblos indígenas mixtecos, mestizos y afrodescendientes. Todos son parajes donde la COPUDEVER, organización a la que pertenecía Fidel Heras, ha logrado una importante influencia en la defensa de los territorios.

Un pronunciamiento realizado este miércoles 27 de enero por 300 personas y organizaciones señala que la población de esta región ha sido afectada durante años “por la pretensión de gobiernos, caciques (personajes que acumulan poder económico y político) y empresas por imponer los proyectos hidroeléctricos: Paso de la Reina y Río Verde”. La última de sus luchas fue contra una empresa particular que extraía minerales pétreos del Río Verde, dentro de la  comunidad de Fidel Heras, y que en tiempos recientes pretendía aumentar el volumen de la extracción, aseguran las organizaciones que se han pronunciado sobre el crimen del campesino.

En Paso de la Reina, la población en general se ha involucrado en la defensa de sus recursos naturales. Foto: Cortesía COPUDEVER.

“En el país se ha incrementado la extracción de materiales pétreos, con el aval de autoridades municipales y poderes económicos regionales. Esta situación se profundiza en los casos de la costa de Oaxaca y Guerrero, en la cual existen antecedentes de imposición de proyectos hidroeléctricos, acompañada de la extracción de arena y grava. Dicha dinámica extractiva instaura un patrón de violencia contra defensoras y defensores comunitarios”, señaló el texto del pronunciamiento.

La Red Mexicana de Afectadas/os por la Minería (REMA) hizo un señalamiento público a la alcaldesa de Santiago Jamiltepec, Cecilia Rivas Márquez, relacionándola con la explotación ilegal del Río Verde y colocándola en el foco de los acontecimientos.

“Como en muchos pueblos de Oaxaca, la extracción de material pétreo de los ríos por parte de autoridades y caciques les significa a éstos un gran negocio a costa de los bienes comunales de los pueblos circunvecinos. En Paso de la Reina, la concesión para la extracción de este recurso la ostenta la familia Iglesias, caciques de larga data, junto con la presidenta municipal de Santiago Jamiltepec: Celia Rivas Márquez”, afirmó REMA.

La Costa Chica de Oaxaca es una región multicultural. Es uno de los pocos lugares con presencia de población afrodescendiente. Foto: Cortesía COPUDEVER.

La Ley Minera de México decreta que la explotación de minerales en los ríos son de utilidad pública con preferencia sobre cualquier otro uso de los terrenos. ¿Qué quiere decir esto? Que la balanza se inclina a favor de quienes quieren extraer estos recursos. En un estudio publicado en la revista Scielo, se explica que esta norma lleva a las comunidades “a una posición de indefensión legal ante la explotación privada de sus tierras, por ser considerada la minería una actividad de utilidad pública, provocando posibles procesos de expropiación y generando conflicto con los modos de vida de las comunidades afectadas”, como sucedió en Paso de la Reina.

Según REMA, “presionaron a las autoridades ejidales para aumentar la extracción”, sin embargo, el convenio que habían suscrito (quienes hacen la extracción de minerales) con las comunidades no se había cumplido, quedaba un pago pendiente, por lo que “el ejido solicitó a su presidente que exigiera el pago del adeudo”, dice REMA.

La organización sugiere que las amenazas recientes contra Fidel Heras “bien puede ser la hoja de ruta para esclarecer este artero crimen, sin descartar su papel como activista contra la construcción del Proyecto Hidroeléctrico Río Verde y del Proyecto Hidroeléctrico Paso de la Reina”.

Mongabay Latam contactó a la municipalidad de Santiago Jamiltepec para conocer la postura de la alcaldesa Cecilia Rivas y hasta el cierre de esta publicación no respondió. También fue contactada la Fiscalía del Estado de Oaxaca, pero la sección de Comunicación Social informó que la investigación está en curso y que por el momento no tienen previsto emitir ningún comunicado sobre el caso.

 

Una mujer cocina mariscos durante la Jornada de Diálogos Culturales celebrado a la orilla del Río Verde. Foto: Cortesía COPUDEVER.

Marcos Leyva informó que Educa está haciendo el seguimiento jurídico del caso y que se prevé la aplicación de medidas cautelares para la comunidad entera.

Paso de la Reina recibió un duro golpe con el homicidio de su líder y por lo pronto esta comunidad está optando por el silencio. “Hay mucho temor en la comunidad. Es una zona bastante violenta. Levantar la voz significa una declaratoria de muerte”, dijo Heladio Reyes, promotor comunitario de la región.

Solo “el paso del tiempo” mostrará los efectos de un hecho tan grave como el crimen de Heras Cruz, dice Marcos Leyva.

“Hay mucho temor en la comunidad. Fidel es una persona que se ha visibilizado, pero hay muchos más que no se han visibilizado: líderes que protestan, que exigen transparencia”, agrega Heladio Cruz.

La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) condenó el homicidio e hizo un llamado a las autoridades judiciales a evitar que la muerte de Fidel quede en la impunidad.

“El asesinato del señor Heras Cruz es una muestra de la vulnerabilidad en la que se encuentran las personas defensoras de derechos humanos en muchos lugares del país. La percepción de que es posible asesinarlas y así debilitar el activismo en defensa de los derechos humanos, como la defensa del territorio y del medio ambiente, se ve fortalecida con cada asesinato que permanece en la impunidad”, dijo Guillermo Fernández-Maldonado, Representante de la ONU-DH en México.

Paso de la Reina optó por el silencio pero no por la inacción. La Asamblea del Ejido ya tomó el acuerdo de seguir defendiendo su medio ambiente y su territorio.

*Imagen principal: Fidel Heras Cruz cambió la tranquilidad de una vida como campesino por la primera línea de la lucha contra poderes económicos que amenazan el medio ambiente y el territorio. Foto: Cortesía COPUDEVER.

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