Y la alianza volvió a nacer

Pesimismo Esperanzador

Por Jorge Rocha, académico del ITESO / @JorgeRochaQ

Hace unos días volvió a la vida la alianza electoral opositora, conformada por los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD). Tomaron dos acuerdos fundamentales: a) competir en alianza por las gubernaturas del Estado de México y Coahuila; en estas elecciones el tricolor llevará mano en la designación de las candidaturas; b) conformar la alianza electoral de cara al proceso presidencial del año 2024; donde el blanquiazul será el partido que tendrá el liderazgo en la elección de la candidatura. 

Aún no sabemos los pormenores de esta alianza y sus alcances para otro tipo de elecciones como serán las de otras gubernaturas en el año 2024 (nueve estarán en disputa) y los procesos electorales de diputados federales, locales, alcaldías y senadores; donde las cúpulas de estos tres partidos deberán hacer acuerdos y arreglos con los militantes de cada entidad.

Luego de los desencuentros de estos partidos en el Congreso de la Unión y de los escándalos del presidente nacional del PRI, Alejandro “Alito” Moreno, parece que estos tres institutos políticos calcularon que era mejor competir juntos que separados, ya que la fuerza electoral que sigue mostrando el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) es muy alta y sólo en alianza tendrían la posibilidad de ser competitivos de cara a la elección de junio de 2024.

Los retos que estos partidos políticos deberán enfrentar son los siguientes:

  1. Una parte importante de la ciudadanía sigue viendo esta alianza como un acuerdo “anti-natura”, ya que estos partidos han enarbolado principios políticos contradictorios entre sí, esto genera una imagen de un alto pragmatismo político que provoca desconfianza en ciertos sectores de la sociedad.
  2. Aunado a lo anterior, estos tres institutos políticos deberán generar una narrativa propositiva y con un plan de gobierno congruente, que vaya más allá del anti-lopezobradorismo. Hasta ahora lo único que cohesiona a estos tres partidos es una férrea oposición al presidente, pero hasta el día de hoy no han podido construir un mensaje claro y positivo de cara al futuro, todo se basa es su animadversión a Morena.
  3. Los tres partidos viven crisis profundas hacia su interior. En el caso del PRI hay un importante sector que no comulga con la forma de actuar del presidente del partido y se han manifestado públicamente en su contra, esto puede provocar que no apoyen la alianza de facto o que se favorezca la migración a Morena. En el caso del PRD, es sabido que este partido está en una franca crisis y en varios estados de la República ha perdido su registro como instituto político. Este partido aporta muy poco en votos. Por otra parte, el PAN también tiene una crisis interna y el liderazgo de Marko Cortés está muy cuestionado, ya que hay sectores del partido que siguen sin digerir la alianza con el PRI. Será fundamental que estas instituciones arreglen sus conflictos internos.
  4. La elección de la candidatura presidencial será un reto mayúsculo, primero porque van tarde. Hoy no existe ningún perfil realmente competitivo frente a Morena y hay demasiados “apuntados” para esta elección, muchos de ellos arrastran un pasado político con muchos problemas y otros son personajes que no reflejan la frescura que debería tener una candidatura de esta naturaleza. Este problema llevó a Jesús Zambrano, presidente nacional del PRD, a pedir que se busque una candidatura ciudadana. Habrá que ver cómo se pone la rebatinga política al respecto.
  5. La conformación de esta alianza parece dejar fuera, de forma definitiva, a Movimiento Ciudadano, que al menos por las encuestas que se han dado a conocer, es el único partido con posibilidades de crecimiento. Frente a una elección demasiado polarizada entre Morena y sus aliados, frente a la alianza opositora, es probable que los decepcionados de ambos grupos, se decanten por el partido naranja que podría experimentar un crecimiento significativo para el año 2024.

Habrá que ver cómo se desarrollan los acontecimientos a lo largo de este año, pero sin duda alguna tendremos un año muy movido, porque también al interior de Morena, seremos testigos de la batalla campal que protagonizarán las y los precandidatos a la presidencia de la República por este partido político. Si Ud. pensaba que la polarización política disminuiría, lo más seguro es que se equivoqué, porque parece que se avecinan mayores confrontaciones. Lo importante será no dejarse llevar por estas narrativas.

Correo electrónico: jerqmex@hotmail.com

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Pesimismo esperanzador
“Pesimismo esperanzado” es una columna escrita por Jorge Rocha, Profesor e investigador del ITESO.

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