“El feminismo es con todxs”: mujeres de la diversidad y disidencias toman las calles en Jalisco

El viernes 8 de marzo a las 4:30 de la tarde, salieron a marchar miles de mujeres, colectivos organizados y disidencias en las calles de Guadalajara, Jalisco.  

La postura de lxs organizadorxs ha sido desde un feminismo interseccional, puesto que, observan que el patriarcado y el mandato de género se vincula con múltiples discriminaciones y opresiones que pueden confluir en una misma persona o colectivo, e incidir en su acceso a derechos y oportunidades. Este enfoque señala que el género, la etnia, la clase y la orientación sexual, están interrelacionadas. 

Por lo mismo, cada año la marcha en Guadalajara ha sido totalmente incluyente y diversa, desde un enfoque plural, respetuoso y sororo con todas las luchas y resistencias. Esta es la historia de cuatro mujeres que han vivido la violencia patriarcal y el mandato de género desde su realidad, la cual es diversa. 

Por Aletse Torres Flores / @aletse1799

“El feminismo es por todas y todes” era la consigna que gritaba Natalia junto con sus amigas, mientras recorrían las calles de Guadalajara este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. 

Natalia es una mujer trans, quien desde el feminismo ha encontrado vínculos que le han permitido construir redes de apoyo y cariño. Asimismo,  considera que las personas trans deben de estar presentes en espacios feministas, puesto que, la violencia patriarcal y machista no es exclusiva hacia las mujeres. 

“Estos espacios también son para nosotras y nosotres, vivimos violencias diferentes, pero al final del día son violencias”. 

Ella salió a marchar por todas las mujeres asesinadas en el país, pero específicamente por el feminicidio de su amiga Ana Gabriela, quien fue asesinada el 6 de marzo de 2024 en su trabajo como coordinadora de admisiones de UTEG. 

De acuerdo con las cifras oficiales, del 1 de diciembre de 2018 al 31 de enero de 2024 se han registrado en México 4 mil 817 casos de feminicidios, acorde al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP). 

Asimismo, se han contabilizado 590 asesinatos de personas transgénero en todo México entre 2007 y 2022, lo que genera un promedio de 53 asesinatos al año, acorde a el Centro de Apoyo a las Identidades Trans (CAIT). 

Con su bandera trans en alto, Ivanna García asistió a la manifestación para exigir justicia por todas las mujeres trans asesinadas y desaparecidas en el país:

 “Por nuestras hermanas trans desaparecidas, por todas las que apagaron sus voces y por todas aquellas mujeres trans violentadas por el machismo de México”.  

México es el segundo país con con mayor índice de transfeminicidios. De la totalidad de los asesinatos que se cometen contra la comunidad LGBTQ+ en el país, el 87% corresponde únicamente a mujeres trans.  

Y en lo que va del 2024, se han registrado seis transfeminicidios en distintos estados de México. Al respecto, la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM) ha reconocido que:

“Estos casos evidencian la intensificación de la violencia hacia las mujeres en razón de identidad de género y que, de continuar con la actual tendencia de asesinatos a personas trans en 2024, México podría superar a Brasil en cifras y ocupará el primer lugar en el mundo de asesinatos a personas trans, principalmente mujeres” pronunciamiento de la CDHCM. 

Ivana espera que este año electoral lxs candidatxs piensen en la precariedad, la discriminación y, con ello, en los derechos de todas  las personas trans en México, es decir, no solamente de las mujeres trans, sino también de los hombres trans y de las personas no binarias. Esta es una de las razones que la llevó a salir a marchar: visibilizar la realidad de las personas trans y representar a su comunidad para que ninguna persona más se sienta sola y “sepa que tienen una red que está luchando por ellxs”. 

La violencia entre mujeres también existe 

Aleida, es una mujer lesbiana que vivió violencia psicológica y sexual por parte de su expareja. Hoy reconoce el abuso que vivió y denunció las agresiones ante las autoridades. 

Sin embargo, al tratarse de una relación entre dos mujeres, las autoridades le dijeron que “no se trata de violencia” y después de largos procesos revictimizantes, Aleida no obtuvo justicia.  De acuerdo con cifras no oficiales en México, en una de cada cuatro parejas (25%) de mujeres se presentan situaciones de violencia doméstica. Al igual que entre las parejas heterosexuales, la violencia puede ser física, sexual, psicológica o patrimonial. Sin embargo, los ministerios públicos obstruyen los procesos de justicia debido a su desconocimiento sobre el tema.

Por esta razón, desde su experiencia, le pide a las autoridades de Jalisco que no desestimen estas formas de violencia y se capaciten para dar cauce a las denuncias para que sean judicializadas y existan sanciones.   

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En otro contingente se encontraba Yarenia junto con su novia Nerea, quienes juntas denunciaron la violencia lesbofóbica que vivieron en sus círculos familiares. Luego de intentar “perdonar” a sus agresoras, Yarenia tuvo que salir de su hogar y del estado por su seguridad para denunciarlas.

Pero Yarenia, como cientos de mujeres, se enfrentó con un muro, donde los procesos judiciales -atravesados por la burocracia y la impunidad- la violentaron y pusieron en duda las agresiones de sus familiares:

 “Prácticamente lo único que pude hacer fue como una advertencia ,por así decirlo como un hey esta persona me quería hacer algo, pero pues no procedió en nada y al final lo que hice fue que me mudé del estado por completo” 

Su proceso lo ha llevado con amigas, terapia y colectivas que le han acompañado para “recordarle” que no está sola y que no se detendrán hasta obtener justicia por su caso y por el de todas. 

En México, desde 2019 se conmemora el 17 de mayo de cada año como el Día Nacional contra la Homofobia, Lesbofobia, Transfobia y Bifobia, con el fin de visibilizar y deconstruir las narrativas que fomentan la lesbofobia, un problema de exclusión que enfrentan las mujeres de esta población y que agrava la desigualdad y la vulneración a la que se enfrentan casi cotidianamente en sus espacios.