En pie de Paz
Por Guillermo Raúl Zepeda Lecuona / CEPAZ
Es una gran noticia que las contribuciones de los profesionales y académicos del Centro de Estudios para la Paz (CEPAZ) del Instituto de Justicia Alternativa (IJA) se integren en un libro que constituye una gran aportación que aborda los diversos ámbitos de la construcción de paz.
El CEPAZ es un espacio muy fértil que ha contado con la buena voluntad, disposición y arduo trabajo de profesionales y académicos dedicados al tema de la Paz en sus diversas vertientes. Los autores de estas contribuciones combinan la preocupación, reflexión y acción para promover la paz, articulando y construyendo acciones y orientando a las políticas públicas. La mayoría de los columnistas agregan a su labor de académicos, la de activistas congruentes y comprometidos con la paz.
En este espacio coinciden doce académic@s que comparten los resultados y avances de sus investigaciones, pero que también apuntan temas de coyuntura, reportan el rumbo que deben tomar las políticas públicas y muestran evidencia de buenas prácticas que deben adoptarse en nuestra sociedad.
Les llamo “destilados” porque los autores sintetizan los resultados de sus pesquisas profesionales en el límite de 700 palabras que requiere los criterios editoriales que ofrece ZonaDocs a sus lectores, lo que permite admirar la capacidad de síntesis, y hace muy fácil y sustanciosa la lectura de sus textos. Han sido un gran acierto las gestiones de los doctores Carmen Chinas y Javier Lozano (también editores de esta obra) de obtener este espléndido espacio para la difusión de las ideas.
Las columnas aquí reunidas son articuladas por los editores en cinco ejes temáticos:
La paz y género contiene profundas reflexiones y transmite la certeza de que no podrá haber niveles significativos de paz, mientras más de la mitad de la población se rezaga y queda particularmente expuesta y vulnerable a la violencia ya la marginación patriarcal. Se abordan desde los ámbitos del cuerpo, las políticas de género o la ruta histórica y destino de las causas de la mujer, que son las causas de todos y de un futuro admisible.
En la paz con educación, se plantea el gran potencial de la escuela y la universidad para la construcción de paz. Desde la asimilación de valores y principios en las nuevas generaciones, hasta las experiencias universitarias de desarrollo de programas e impulso de estudios, investigaciones y propuestas de políticas públicas. Esto contribuye con el desarrollo de competencias para una paz sustentable.
En la paz y justicia se aborda la necesidad de construir la paz con cimientos de justicia. Muchos actos de violencia nacen de la percepción de haber sido tratados con injusticia. La paz se construye con diálogo y consenso; dando acceso a la justicia que reduce, en las regiones apartadas la cifra negra del conflicto: miles de pequeños conflictos vecinales, pequeños adeudos que, al no poder ser canalizados a medios de solución efectiva, maceran resentimientos y generan las condiciones para escalar en niveles de violencia hasta llegar a crímenes.
En el eje Paz, memoria y conflicto se presenta la agenda internacional humanitaria y de avances para la paz desde la comunidad y la experiencia internacionales. También se da espacio al tema de las desapariciones y el derecho a la memoria, a revertir esa espiral de indiferencia y sufrimiento, para llevar empatía, acciones y justicia a esos miles de familias que como dice una madre buscadora, “mientras el resto de las personas vive su vida a colores, la nuestra se quedó en pausa y en blanco y negro”.
Paz y sociedad es un apartado esperanzador donde se refiere la reserva de empatía que reside en el subsuelo emocional y cultural mexicano; la posibilidad de generar paz desde las familias, desde la comunidad. La posibilidad de soñar futuros mejores y hacer de la esperanza una tecnología de la paz.
Reconozco la labor incansable de los colegas que colaboran en este espacio, a su inteligencia para hacer un diagnóstico académico minucioso y para formular propuestas viables y efectivas; y por su pasión para tomar esta ardua agenda, y llevar con congruencia su compromiso militante con la paz.


