Amili: el espacio donde el cariño y la resistencia se fusionan

Los habitantes de la colonia Felipe Carrillo Puerto en Querétaro se resisten a ser consumidos por la industrialización de la zona a través de la preservación de Amili, un pequeño espacio para florecer.

Por: Gina M. Erosa / @ginaemerosa

Viajemos al año 1941 cuando fue fundada la Delegación Felipe Carrillo Puerto al oeste de Querétaro. En ese entonces el pueblo agrícola no sólo era conocido por su gran fertilidad, también por sus milpas norias, campos de flores, huertas y pozos de agua. Las infancias podían disfrutar de juegos al aire libre, deportes y aire fresco.

Sin embargo, conforme la ciudad fue creciendo la industria rodeó esta zona, destruyendo su estructura comunitaria, llenando los baldíos de basura y convirtiendo al pueblo no sólo en el más contaminado del país sino también en un lugar que hoy carece de zonas verdes.

Por esta razón es que se buscaron alternativas: en el barrio de El Llanito, calle Aquiles Serdán se encuentra un baldío intestado que lleva 40 años abandonado. El terreno perteneció en vida a la señora Socorro Herrera H, que vivió sus últimos años en la Ciudad de México y cuyos familiares no han logrado ser contactados.

El abandono no frenó su historia, pues a lo largo de los años fue utilizado como zona de descanso y recreativa, incluso, fungió como cancha de fútbol para equipos locales hasta que fraccionamientos cercanos comenzaron a verter su basura ahí. Eventualmente, después de mucho trabajo comunitario, se convirtió en Amili Tierra Feliz y Florida, espacio registrado -en 2013- ante la Casa de Vinculación Social.

ZonaDocs realizó una entrevista con Jacqueline, Joy, Adrián, María y Mike, miembros del comité de Amili, en la que nos comentaron sobre la historia del lugar y la labor que llevan a cabo junto con la comunidad para preservarlo.

“Se bautizó como Amili por los ancianos del pueblo. – señaló Joy – Es un nombre en náhuatl que significa tierra de cultivo. Por eso se llama Amili Tierra Feliz y Florida”

Según el Artículo 4° de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, toda persona tiene derecho a un medio ambiente sano para su desarrollo y bienestar y el Estado debe garantizar el respeto a este derecho, por lo que la comunidad ha presentado en dos ocasiones una solicitud para expropiar y regularizar el predio para así ponerlo al servicio de la comunidad como jardín y espacio recreativo público.

Con esta solicitud se busca que Amili sea reconocido como parque y que el Estado se encargue de su mantenimiento, puesto que al ser considerado propiedad privada no pueden intervenir en su protección. Hasta el momento, este espacio ha sido preservado por la comunidad, quienes además de hacer trabajos de faena y limpieza han sido los encargados de aportar los recursos.

“Toda la gestión corre por cuenta de la comunidad y hay momentos en los que nos rebasa en cuanto a herramientas, mantenimiento y plantas que crecen demasiado en tiempos de lluvia. En Carrillo Puerto existe un riesgo muy alto de inundaciones y la falta de áreas verdes acrecienta esta problemática. En las temporadas de otoño e invierno las plantas se comienzan a secar y se vuelven foco de incendios por el uso de fuegos artificiales” mencionaron Adrián y Joy.

La insistencia también viene del miedo a que este predio sea adquirido por industrias cercanas y ¿cómo no? si una zona que hace menos de un siglo era conocida por sus áreas naturales fue acorralada por empresas que la convirtieron en gris. El comité menciona que no se cierran a la idea de la expropiación, más bien se mantienen abiertos a la solución que sea más conveniente para el espacio siempre y cuando se cuente con asesoría legal.

Actividades en Amili

“El trabajo por defensa de un espacio como este no solo se hace a través de faenas, también con presencia, el compartir. El Querido Picnic ha sido una forma afectiva de encontrarnos, conocernos y escuchar a nuevas personas” enfatizó Joy.

Amili invita a través de sus redes sociales a cualquier persona dispuesta a pasar un buen rato y a compartir a unirse a sus actividades entre las cuales destaca el Querido Picnic, una iniciativa creada en Ciudad de México como defensa hacia el Jardín Botánico y el Orquidiario de Chapultepec y que se extendió a la comunidad de Carrillo Puerto. Los picnics – que se realizan cada tercer domingo del mes – tienen temáticas según la época del año, en el de este mes se realizó una sesión de prensado de flores y hojas.

Adicionalmente, Amili fue sede de las Agrolimpiadas, evento a nivel nacional que busca cumplir con los quehaceres agroecológicos a través del juego y del trabajo en equipo. En esta dinámica también se reconoce a todo aquel que muestra apoyo sin que exista necesariamente un ganador. “Se lleva medalla al que más intentaba y que aunque no le salía no dejaba de intentar. O aquel que fue el más risueño durante toda la actividad” señaló Joy.

La participación ciudadana es fundamental tanto para seguir llevando a cabo este proyecto como para generar presión en las autoridades para así poder tener una solución a las solicitudes de la comunidad.

“A final de cuentas Amili no solo es un campito, es de los pocos espacios verdes, libres y accesibles cercanos que tiene la zona tradicional de Carrillo Puerto. En Querétaro y en muchas ciudades el acceso a áreas verdes está profundamente marcado por desigualdades estructurales y sistemáticas. Tener un sitio seguro al aire libre significa bienestar físico y emocional”

Actualmente, este proyecto tiene vigente una campaña en Change.org  en la que puedes apoyar sus causas y eventos, los cuales se difunden también de su perfil de Instagram:

https://www.instagram.com/amili.carrillo/followers/mutualOnly