Miles de personas se dieron cita en el corazón de la Ciudad de México para presenciar el Desfile de Día de Muertos 2025, una celebración que rindió homenaje a figuras icónicas de la cultura popular y a momentos históricos como la fundación de Tenochtitlán y el sismo de 1985.
Por Denisse Ureña / @denisseure_
Ciudad de México, 1 de noviembre de 2025.- Entre flores de cempasúchil, música, comparsas y colores que evocan la memoria, miles de capitalinos y visitantes de otros estados y países disfrutaron el Gran Desfile de Día de Muertos, una de las tradiciones más esperadas del año en la capital mexicana.
Este año, el desfile rindió homenaje a personajes emblemáticos de la cultura popular mexicana como Carlos Monsiváis, Paquita la del Barrio, Tongolele y Rockdrigo González, quienes con su arte y rebeldía marcaron generaciones y continúan inspirando la identidad colectiva del país.



El recorrido también conmemoró los 700 años de la fundación de la Gran México-Tenochtitlán y recordó momentos que han dejado huella en la historia reciente, como el sismo de 1985.
Durante su mensaje, la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, destacó que detrás de cada carro alegórico, comparsa y rostro pintado hay un esfuerzo colectivo de más de ocho mil participantes, entre artistas, cartoneros, músicos, bailarines, productores y centros culturales.
“Detrás de cada obra monumental, de cada flor de cempasúchil, están las manos de nuestras artesanas, de los talleres de los centros culturales, de los Pilares y las Utopías, donde miles de jóvenes y maestros construyen día a día una ciudad más creativa, más solidaria y más viva”, expresó Brugada.



El desfile contó con la participación de más de 50 comparsas y nueve bloques temáticos —“700 años”, “El último viaje”, “Faros”, “De México para el mundo”, “Comunitaria”, “Utopías”, “Tradición y renovación”, “La gran Ciudad de México” y “Injuve”—, integrando expresiones de distintos estados de la República, colectivos, batucadas y carnavales.
En punto de las 14:00 horas, el estruendo de las percusiones marcó el inicio del recorrido. El carro alegórico “Corazón de Tenochtitlan: 700 años”, elaborado por el taller El Volador, encabezó el desfile con dos serpientes emplumadas alusivas a Quetzalcóatl, un águila sobre el nopal y el Huey Teocalli al fondo: símbolos que recordaron el origen y la vitalidad de la ciudad.
Niñas y niños observaban emocionados desde los hombros de sus padres, mientras turistas capturaban con sus celulares cada detalle de esta muestra de arte y tradición popular. El ambiente festivo culminó en la Plaza de la Constitución, donde la Ofrenda Monumental de Día de Muertos recibió a los contingentes entre miles de flores y figuras de papel maché.


El desfile fue acompañado por las secretarias de Cultura, Ana Francis Mor, y de Turismo, Alejandra Frausto Guerrero, además del subsecretario de Grandes Festivales, Argel Gómez Concheiro.
Entre música, danza y comunidad, el Gran Desfile de Día de Muertos reafirmó el espíritu colectivo de una ciudad que celebra la vida y honra a sus muertos con arte, memoria y orgullo.


