Este viernes 14 de febrero se cumple un año de los hechos violentos que le arrebataron la vida a toda una familia en Acolman, Estado de México. Quienes les aman exigen justicia y no olvido.
Esta historia puedes escucharla también en la primera emisión de la temporada dos de ZonaDocs Radio: “Esto no es un show: las voces que resisten en la verdad, la justicia y la paz”.
Por Dalia Souza / @DalhiaSouza
“Necesitamos cambios, necesitamos estrategias reales, necesitamos que los criminales paguen por lo que están haciendo. Necesitamos justicia. Y que otros no pasen por lo que nosotros estamos pasando. Este no es un show, es la vida de nuestros seres amados”.
Erika García, busca justicia para su familia, lo hace desde que su padre, el señor Carlos, su madre, la señora Zenorina, y su hermano, Carlitos, quien padecía de parálisis cerebral, fueron asesinados cruelmente dentro de su casa en Acolman, Estado de México. Frente a la Estela de Luz en la Ciudad de México, ese monumento gigantesco (con forma de galleta) que pocos saben por qué o para qué lo instaló ahí Felipe Calderón, Erika sostiene con sus dos manos una lona con la fotografía de sus padres y hermano. Con tristeza y rabia, relata brevemente el evento más fatídico de su vida y por el que hoy se encuentra aquí:
“El pasado 14 de febrero de 2019, me mataron a mi papá, a mi mamá y a mi hermano con parálisis cerebral, él no podía mover sus cuatro extremidades él no pudo mover ni un solo dedo, entraron a su casa y me los masacraron, en Acolman, Estado de México”.
A un año de distancia de los hechos que le arrebataron a sus padres y hermano, hay un sólo detenido, un presunto multihomicida de nombre Saúl Emmanuel “N”. Si bien, Erika reconoce que “han estado trabajando” en la Delegación de la Fiscalía del Estado de México en Ecatepec, la zozobra le acompaña, y es que, refiere que “para como están nuestras leyes y autoridades” teme que se le deje en libertad.
Hoy hace un año, dice Erika, “nos desgarraron el alma, hoy hace un año nos arrancaron de una forma inhumana a nuestra familia”. Frente a la realidad adversa que enfrenta el país, aún le resulta lamentable que las personas, en su mayoría, sean indiferentes ante tanto dolor, por esta razón exige justicia a la autoridades del Estado México y a la sociedad: memoria y no olvido sobre lo ocurrido a sus seres amados el pasado 14 de febrero de 2019 en Acolman, Estado de México.
