Hechizo de amor propio: autoerotismo y sororidad

Ilustración portada: Suppel

Múltiples factores sociales y culturales son los que impiden a las mujeres conocer algo que es de ellas, y sólo de ellas: sus cuerpos. La religión y el machismo encabezan esta lista que hace que una mujer se sienta mal consigo misma cuando se trata de conocer y apropiarse de su cuerpo, y más cuando esto implica sentir que sus pensamientos y fantasías les pertenecen.

En el mes que se ha instituido como el dedicado al amor, se realizó el taller Rompe tu hechizo: cero represión y más orgasmos, dirigido por la maestra y psicoterapeuta corporal, Elba García; esto en el marco del evento “Desencantando el Amor Romántico: Sextas Jornadas de Sexualidad y Género” realizado en el Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) de la Universidad de Guadalajara del 19 al 20 de febrero.

Las actividades que se llevaron acabo en el taller fueron simbólicas para que cada una de las participantes se desprendieran los miedos, los prejuicios y los estereotipos que les dicen que no son lo suficientemente hermosas para ser amadas, pero también para deshacerse de todo tipo de ideas machistas que sólo las oprimen y les impiden ser realmente felices con la única persona con la que pasaran el resto de sus vidas: ellas mismas. La segunda parte de esta intervención simbólica fue cambiar todo lo que les oprime por lo que desean cultivar de manera individual.

Una de las conclusiones a las que llegaron las asistentes es que en todo momento se sintieron seguras, ya que no se sintieron juzgadas por no atender al modelo de “belleza femenina” que se les enseña desde niñas. Al respecto, una estudiante de movilidad que asistió al taller mencionó que -a pesar de no estar ni en su escuela, ni en su país-, pudo disfrutar del respeto mutuo.

Otras de las conclusiones estuvieron relacionadas con uno de los puntos principales del taller: “el autoerotismo como forma de expresar amor a tu propio cuerpo, y la importancia de globalizar la excitación –a lo largo y ancho de nuestro cuerpo–“, más allá de lo que les enseña la cultura y la sociedad en la que se encuentran inmersas.

Espacios como éste en los que sólo se está con más chicas que han vivido y que sienten las consecuencias del sistema patriarcal, aseguraron las asistentes, son necesarios para reafirmar: la sororidad, el amor, el erotismo y el apoyo que existe en la comunidad feminista

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Samantha Anaya
Samantha Anaya
Amo pasar tiempo con mi persona favorita: mi mamá. Considero que el ser periodista implica hacer un compromiso con la verdad, la justicia, la empatía y, sobre todo, con las personas.

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