El acto fue convocado por diversas colectivas feministas en el estado, entre ellas el Aquelarre Radical GDL, Mis Amigas Me Cuidan y Mis Amigas Me Acompañan; con un pliego petitorio que será entregado a las y los diputados del Congreso del Estado de Jalisco, exigieron la despenalización del aborto hasta las 12 semanas para garantizar el acceso a la interrupción voluntaria del embarazo; la modificación de los artículos 227, 228 y 229 del Código Penal del Estado que criminalizan y sancionan a las mujeres que deciden abortar; la adición de la excluyente de responsabilidad “por causas económicas”; y la expedición de una Ley de Amnistía para las mujeres que han sido sentenciadas y criminalizadas por ejercer su derecho al aborto.
Además, según señalaron desde este 28 de septiembre de 2020, la antes conocida “Plaza Liberación”, será conocida como “Plaza Liberación de las Mujeres”.
Sin embargo, pese a que las mujeres y colectivas en Jalisco han repetido una y otra vez en consignas que “la Policía no les cuida, les cuidan sus amigas”, manifestándose así en contra de la presencia de elementos de seguridad dentro de sus movilizaciones y contingentes, una vez más y frente a la oleada nacional de represión policial a la protesta feminista, más de 300 agentes de seguridad municipal, del estado, de la División Especializada en la Atención a la Violencia Contra las Mujeres en Razón de Género (DEAVIM) y antimotines, cercaron y flanquearon el paso de la marea verde en las calles de Guadalajara, Jalisco, este 28 de septiembre.
Por Dalia Souza / @DaliaSouzal
Fotos: Mariana Parra / @MarianaParraMa1
La movilización por el Día de Acción Global por un Aborto Legal y Seguro en la capital del estado estaba programa para arrancar en punto de las 5:00 p.m. del Monumento a La Madre rumbo al Congreso del Estado de Jalisco en el centro histórico, sin embargo, desde antes de las 4:00 p.m. los edificios del Poder Legislativo y Palacio de Gobierno ya se encontraban resguardados por policías estatales y vallas metálicas.
Sin que esto les detuviera, a lo largo de su recorrido, más de 700 mujeres jóvenes, niñas y madres, visibilizaron aquello que el Gobierno de Jalisco ha pretendido negarles: el derecho a la libre determinación sobre sus cuerpos y a abortar de manera legal y segura, sin temor a morir en el intento o a ser encarceladas; pues como advirtieron, esta decisión es también un acto de justicia social para todas.
Al grito de “Fuimos Todas” con calcamonías, grafitis, pintas, pancartas y carteles llenaron las calles de la zona centro de Guadalajara con mensajes, información y vías de contacto para llevar a cabo abortos seguros, autónomos y desde casa: “Misoprostol, cuatro pastillas sublinguales cada 4 horas, repite hasta completar 12 pastillas; aborta segura, infórmate no estás sola” podía leerse en las lonas que colocaron en uno de los puentes peatonales frente al popular Mercado San Juan de Dios.
En el centro histórico ya las esperaban también los grupos antiderechos, quienes, formando una valla humana, rodearon la Catedral de Guadalajara con rosarios, sogas y rezos; buscaban proteger de los grafitis la estructura de piedra que “resguarda su Dios”, pero que persigue, señala, castiga y criminaliza a las mujeres que han rechazado el dogma del hombre y que han decidido sobre la “única vida que importa”: la vida de las mujeres, señalaron.
Frente a la resistencia de los grupos antiderechos, quienes en múltiples ocasiones rodearon el edifico emblema del catolicismo en el estado, fue desplegado un grupo de mujeres antimotines que se encargaron de replegar a las manifestantes que se encontraban en las inmediaciones del lugar. Lenchanteé Corona, nombre Drag que representa la lucha política de una de las integrantes de la Batukada Feminista Guadalajara se pronunció al respecto asegurando que este acto por demás violentó evidenció cómo es que el miedo cambió de bando y a quiénes en realidad está resguardando el Estado:
“Ya nos venían siguiendo, como queriendo reprimir en las pintas, pero ya cuando llegamos a catedral que sabíamos que iban a estar los grupos provida fue muy notorio a quienes estaban defendiendo. Nosotras les decíamos: tú estás aquí para cuidarme, no para cuidar una iglesia, ojalá nos cuidaran como cuidan su catedral. Sacar a estar personas antimotines a pesar de que fueran mujeres es un acto super violento, nosotras tratamos de calmarnos, les hicimos frente, cerca, pero con eso nos quedó más que claro que con tantas policías, tanto antimotí, defendiendo a 30 personas y una iglesia está clarito que el miedo ya se cambió de bando”, expresó.
Ya frente a las puertas del Congreso del Estado de Jalisco ubicadas sobre la calle Hidalgo a un costado de Plaza Liberación, pronunciaron algunas plegarias a la Santa Abortera: “Que el aborto no sea la hora de nuestra muerte y que voluntario sea el fruto de nuestro vientre”, repitieron junto al repicar de una campana.
Además, señalando que la legislación del Estado de Jalisco se encuentra muy distante a los estándares internacionales para la protección de los derechos humanos de las mujeres y, advirtiendo que en el estado se tiene una constitución que no observa, ni establece un ejercicio de proporcionalidad que garantice y respete los mismos, presentaron un pliego petitorio que será entregado a las y los diputados de la LVXII Legislatura, firmado por las colectivas organizadoras del evento y por decenas de mujeres a título personal.
En éste exigieron la despenalización del aborto hasta las 12 semanas para garantizar el acceso a la interrupción voluntaria del embarazo; la modificación de los artículos 227, 228 y 229 del Código Penal del Estado que criminalizan y sancionan a las mujeres que deciden abortar; la adición de la excluyente de responsabilidad “por causas económicas”; y la expedición de una Ley de Amnistía para las mujeres que han sido sentenciadas y criminalizadas por ejercer su derecho al aborto.
Para finalizar, las colectivas presentes decidieron que, desde este 28 de septiembre, la conocida Plaza Liberación frente al Teatro Degollado en el centro histórico de Guadalajara, será nombrada “Plaza Liberación de las Mujeres”.
Finalmente, se denunció que durante el evento una de las integrantes de la colectiva feminista Me Cuidan Mis Amigas fue agredida por un fotógrafo, quien con el lente de su cámara golpeó la cara de la joven, luego de que ésta le señalara que no podía grabar y fotografiar a las mujeres que se manifestaban frente a los grupos antiderechos. Habrá que señalar que, el llamado de las organizaciones de mujeres fue a realizar una movilización separatista, donde se solicitó a los diversos medios de comunicación que enviaran reporteras y fotógrafas a realizar la cobertura del acto.
