“Temporada de campo” es el nombre del documental que retrata la vida de Bryan, quien ayuda a sus padres en las labores del rancho familiar cuando es verano. La pieza explora la vida de este niño, narrando sus experiencias en el campo, la relación que tiene con su familia, su desamor por la escuela y su sueño de ser vaquero como su abuelo.
El filme se encuentra disponible en las salas de cine desde el 4 de agosto.
Por Aletse Torres Flores / @aletse1799
Fotos: Isabel Vaca
En el municipio de Chinampas, Jalisco, vive Bryan junto con su familia, tiene 12 años, está estudiando la secundaria, su materia favorita es matemáticas, le gustan las corridas de toros y su mayor sueño es trabajar como vaquero en “La Punta”.
Bryan es el protagonista del documental “Temporada de Campo”, en el cual se plasman las aventuras que vive con sus amistades, su relación con su padre, sus responsabilidades en el rancho de su familia, sus disgustos y su mayor pasión. A través de la pantalla, caminamos a su lado y conforme avanza la película vemos un crecimiento en él.
Isabel Vaca, directora de la pieza, narra que tuvo una conexión con Bryan el día que lo conoció, le recordó su infancia y el amor que tenía al estar en el campo:
“Mi familia tiene un rancho de toros en Aguascalientes y la familia de Bryan ha trabajado con nosotros desde hace 25 años, de ahí surgió la conexión. Yo tuve la oportunidad de crecer de cerca en ese mundo y me pareció importante contar esta historia”.
Foto: Isabel Vaca
En 2016, Isabela realizó un teaser del documental con el cual ganó una beca en Instituto Tribeca Film y gracias a esto, logró comenzar lo que parecía solo una idea. Explica que para lograr capturar esta historia tuvo que ir construyendo un vínculo de confianza con la familia de Bryan, explicándoles sus intenciones y la dinámica de grabación.
“Fueron un par de años de investigación, iba a visitarlos a su pueblo cotidianamente y hacíamos ejercicios con cámaras y me fui involucrando cada vez más en su dinámica”.
Arturo Mendicuti, productor del filme, habla sobre la importancia de no incomodar a ninguna de las personas que aparecen como protagonistas de la historia, de tal forma que se obtenga como resultado un trabajo respetuoso y un producto más orgánico.
El documental ganó el Premio del Público en la categoría de Largometraje Documental Mexicano en el Festival Internacional de Cine de Morelia 2021. También, fue exhibido en Canadá y Suiza dentro de la competencia oficial de los festivales HotDocs y Vision du Réel.
Para la directora, esta fue una oportunidad para que las personas se acercaran a la vida de campo y, con ello, romper los estereotipos que les rodean:
“Se piensa que el campo solo es cuidar ganado o tener agricultura, es el único enfoque que siempre nos cuentan” sentenció Vaca.
Mendicuti manifiesta que no solo se trata de ver las aventuras de Byran, el documental busca acompañarlo en su proceso a la adolescencia, de notar las deficiencias del sistema educativo para las personas que habitan zona rurales, la relación que tiene con su padre ausente, la precariedad laboral y cómo es vivir con todo esto:
“Esta película tiene un retrato de diferentes problemas sociales en México que no son la parte del foco, pero sí salen retratadas, como la educación y cómo parece que no se adapta a la gente del campo, así como todas las situaciones que se presentan”.
Foto: Isabel Vaca
Otro de los temas que toca la película es la migración, puesto que, desde temprana edad, Bryan dejó de ver a su padre porque se fue a trabajar a Estados Unidos. Al principio el protagonista admiraba a su padre y quería conocer más sobre quién era.
No obstante, conforme fue pasando el tiempo, Bryan se da cuenta que su padre no les apoya, ni a él ni a su madre, ni siquiera les manda mensajes. Así fue como Bryan “deja de quererlo” y encuentra otras figuras paternas en su familia, como sus abuelos o tíos.
También, las cámaras captaron la normalización de la violencia entre la niñez, quienes en lugar de jugar policías y ladrones, jugaban a “la migra”. Cada uno de los temas fueron surgiendo sobre la marcha y el trabajo fue darles sentido para lograr contarlos dentro de la película:
“Se trabajaron de manera muy orgánica, y eso nos hizo perder el foco de lo que buscábamos, que era Bryan y como todo su entorno le afectaba” manifestó Arturo en la entrevista.
Por lo mismo, en la pantalla se plasman algunos de los problemas con los que lidia Bryan, tales como: la exclusión de sus compañeros en su escuela por su forma de vestir y hablar, o su desapego con su padre hasta el punto de querer cambiarse el apellido.
Finalmente, vemos los sueños del niño, sus ganas de trabajar de vaquero como su abuelo, de un día estar en “La Punta” y poner orgullosa a su madre.
“Yo un día quiero ser como mi abuelo, quiero ser vaquero” dice Bryan en una de las escenas del filme.
La película llegó a las salas de cine el 4 de agosto, para conocer en qué cines se encuentra disponible consulta las redes de @temporadadecampo y @somospiano
Vivo de café, amo los gatos, no creo en las etiquetas. Desde niña quise ser periodista por Spiderman, me invento unas fotos, cubro cualquier tema con pasión, respeto y verdad.
