Guadalajara, entre la sed y el humo

Pesimismo Esperanzador

Por Jorge Rocha, académico del ITESO

Volviendo con los temas locales y de la vida cotidiana en la ciudad de Guadalajara y los municipios que la componen, en lo que va de la temporada de estiaje, la ciudad se debate entre la sed y los incendios, entre comprar pipas de agua y respirar humo, todo en ello en medio de una sequedad penetrante y un calor intenso. Lejos quedaron aquellos días que nos congratulábamos de contar con un clima fresco y sin problemas de abasto de agua de calidad.

Los datos son contundentes, en lo que va de este año, Jalisco registra un poco más de 700 incendios forestales que han afectado a más de 45 mil 700 hectáreas y se han declarado varias contingencias ambientales en distintas regiones del estado. El trabajo de los brigadistas es heroico, pero parece que las causas de estos eventos no son atendidas con suficiencia y tampoco están claros los procesos de reparación del daño y el establecimiento de medidas prácticas para evitar estas conflagraciones en el futuro.

Aunado a lo anterior, las quejas ciudadanas en diversas colonias de la ciudad, muestran un proceso de distribución de agua que no funciona del todo o más bien, funciona de forma muy deficiente. De acuerdo al diario NTR, el Sistema Intermunicipal de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) es la dependencia con la mayor cantidad de quejas ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHJ) durante los años 2021 y 2022. Esto se añade a los problemas cotidianos de aguas turbias, a veces con colores raros y con olores que denotan un proceso de potabilización poco riguroso. Esto afecta a muchas personas, desde fraccionamientos como Solares, colonias tradicionales como Ciudad Granja, y colonias ubicadas hacia las afueras de la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG), como el Vado y Santa María del Pueblito.

El problema está claro, los datos están presentes y sus relaciones causales son nítidas, al menos para mí, y es que Jalisco y Guadalajara siguen perdiendo su masa forestal y cada vez tenemos menos agua de calidad disponible. Frente a un problema que se visibiliza año con año en la temporada de secas, viene un ciclo pernicioso, primero de denuncia pública, de indignación social, de mediatización de la agenda y de explicaciones o no respuestas gubernamentales, que con el comienzo del temporal de lluvias se nubla y volvemos a la misma insensibilidad de antes, que se vuelve a activar el año entrante con un incendio que provoca una alerta ambiental severa. Este es un ciclo nocivo que al final del día nos deja con menos áreas de bosques, con más humo, con más sed, con más calor y con menos agua de calidad. Resulta preocupante que en un escenario como el que describí, la Comisión Nacional de Agua (CONAGUA), haya otorgado 631 nuevos permisos de concesión de agua, de los cuáles la mayoría se van a destinar a cultivos de aguacate, agave y berries. Lo que aparece como la hipótesis más firme, es que en nuestro estado las necesidades capitalistas y de negocios, están sobre las necesidades de las personas de contar con agua de calidad y con un ecosistema sano.

Cada año las y los que observamos los fenómenos de la ciudad, hacemos un comentario o escribimos una columna sobre este tema, cada año decimos que se tiene que resolver y cada año, pasa lo mismo. La pregunta es ¿cuándo vamos a romper este círculo vicioso? Por lo pronto parece que seguiremos con sed y con el riesgo latente de respirar más quemazones.

Post Data 1. Luego del “auto-despate” del senador Clemente Castañeda en el municipio de Autlán, para contender por la gubernatura de Jalisco, parece que el segundo semestre pinta para que dos candidatos disputen esta candidatura por Movimiento Ciudadano (MC): Pablo Lemus y Castañeda, habrá que ver quién logra más alianzas y acuerdos al interior del partido naranja y quién tendrá la venia del Gobernador.

Post Data 2. La frivolidad de la clase política local fue patente con la pelea del Canelo Alvarez. Resulta de pésimo gusto que frente a la lista de problemas que enfrenta el estado y la ciudad, las y los políticos locales destinen tanto tiempo y esfuerzos para colgarse del logro deportivo de un boxeador, en un evento privado y destinado a un enorme despliegue propagandístico que tiene como único fin hacer negocios particulares. Ojalá dieran a otros temas y otros colectivos sociales el mismo trato, pero parece que la frivolidad es lo suyo.

Correo electrónico: jerqmex@hotmail.com

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Pesimismo esperanzador
Pesimismo esperanzador
“Pesimismo esperanzado” es una columna escrita por Jorge Rocha, Profesor e investigador del ITESO.

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