Las pre-campañas, un mal experimento

Pesimismo Esperanzador

Por Jorge Rocha, académico del ITESO / @JorgeRochaQ

En el caso de Jalisco en la primera semana de enero concluyeron las pre-campañas electorales, es decir, pre-candidatos a la gubernatura, presidencias municipales y diputaciones locales ya entraron en el periodo de intercampañas. Para el caso de la elección federal, será hasta el 18 de enero cuando las precampañas terminen y entremos en el periodo de receso.

Desde antes varios anticipamos que esta etapa del proceso electoral tenía muy poco que aportar, ya que los supuestos objetivos que tienen las precampañas ya estaban resueltos, sobre todo lo referido a la elección interna (o primarias) donde realmente se elige a una candidata o candidato entre varios que disputan la designación. Para el caso de la elección presidencial o de gobernador donde había candidaturas únicas, este proceso resulta absurdo e innecesario.

Ahora bien, haciendo un balance de los que fue esta parte del proceso electoral, podemos plantear algunas consideraciones al respecto:

1. En las pre-campañas no se gestó ningún debate importante, no se tocaron los temas cruciales para la ciudadanía, en general hay una banalización de lo público, se pinta un estado y un país que no existe, ya que en algunos casos se omite el presente, en otros el pasado no existe y en la mayoría de los casos el futuro es idílico y no se corresponde con lo que tenemos. La disociación entre la realidad y lo que se expone en las campañas es enorme.
2. La ciudadanía mostró muy poco entusiasmo por estas pre-campañas, que de acuerdo a lo que marca la ley, sólo están orientadas a los militantes y simpatizantes de cada partido político, pero al tener un formato de campañas políticas, en realidad todas y todos los ciudadanos se vuelven depositarios de estas campañas simuladas. Lo que prevaleció en el ánimo ciudadano fue el hartazgo, las pre-campañas no propiciaron interés y sólo nos quedamos con algunas estampas muy particulares como unos tenis de color muy resaltante, una candidata que no sabía el nombre de un libro que supuestamente escribió o una candidata que dista mucho de tener el carisma del presidente de México. Estas pre-campañas no dieron para más.
3. Tampoco podemos considerar que se gestó ningún proceso de pedagogía política y democrática, los partidos políticos no se fortalecieron en su democracia interna, los ciudadanos no aprendimos nada sobre la democracia, los organismos electorales no tenían claridad de cómo intervenir, incluso llegamos a ver candidatas y candidatos muy poco cómodos con este formato tan abierto y tan restrictivo a la vez. Lo que si se pudo observar, al menos en el caso de Jalisco, es que ninguna de las tres fuerzas políticas locales tienen la cohesión interna requerida para encarar un proceso electoral, más bien vimos las fisuras y los conflictos internos.
4. Lo que si fluyó en esta etapa del proceso electoral fueron los recursos: realización de mítines, de reuniones, de acarreos, se regalaron banderas, playeras, gorras, calcamonías, mantas, entre otro tipo de eventos y productos que todas y todos los pre-candidatos regalaron en sus actos de pre-campaña. Aquí no hubo austeridad, más bien se quedó una sensación de derroche que se tradujo en acusaciones mutuas entre los partidos políticos que hasta ahora no se han convertido en casos concretos.
5. Para el caso de Jalisco tuvimos pre-campañas incompletas, ya que en el caso de Movimiento Ciudadano hasta el término de éstas, no había candidato a la presidencia de México, y por el lado de la mega alianza entre Morena-Partido Verde-PT-Hagamos-Futuro, no hay claridad en las designaciones para algunas candidaturas clave, por ejemplo, en los ayuntamientos de Guadalajara y Puerto Vallarta. Esto provocó que no hubiera un panorama completo de lo que serán las campañas que comienzan en marzo de este año.

Con todo lo anteriormente dicho, queda claro que las pre-campañas fueron inservibles, caras, aburridas, con poco involucramiento ciudadano y con un propósito poco claro. Esta experiencia tendría que obligarnos a replantear este momento de las campañas y acotarlo para no convertirlo en una simulación que muy poco ayuda a fortalecer nuestra precaria democracia.

Por lo pronto les deseo a todas y todos los lectores de Zona Docs un año 2024 lleno de logros y momentos enriquecedores para Uds y sus familias.

Correo electrónico: jerqmex@hotmail.com

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Pesimismo esperanzador
“Pesimismo esperanzado” es una columna escrita por Jorge Rocha, Profesor e investigador del ITESO.

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